Llamados a perdonar


Llamados a perdonar
El llamado de Jesús es: "Haz a los demás todo lo que quieras que te hagan a ti". (Mateo 7:12). Sin duda alguna en pleno siglo 21 Jesús nos sigue llamando a examinarnos y a preguntarnos: ¿Hago a los demás lo que quisiera que me hicieran a mí? imagino que probablemente nosotros tenemos diferentes respuestas. "Intento vivir de esta manera, sin embargo, hay algunas personas que simplemente me vuelven loco". O podría decir: "Puedo hacer eso con la mayoría de las personas, pero hay una persona en particular que me hirió de tal manera, por lo tanto, me siento incapacitado de hacerlo” en otras palabras perdemos la capacidad de perdonar. 
Y es precisamente en este momento donde podemos traer las palabras de Jesús: “Si amas a las personas que te aman, ¿Qué crédito tienes para ti? Incluso los paganos hacen esto. Deja de juzgar y no serás juzgado. ¡Deja de condenar a los demás y no serás condenado!” Jesús luego dice: “Perdona y serás perdonado. La medida que dé será la medida que se le devuelva ". (Mateo 5: 46)

Estas palabras que no tienen rodeo alguno son difíciles de escuchar, precisamente por desafiarnos al nivel más profundo. Seguramente, cada uno de nosotros haya sido herido, olvidado, traicionado o rechazado en diferentes momentos de nuestro diario vivir. Si esta persona era cercana a nosotros, esa herida se hace más grande ya que confiábamos en esta persona. No obstante, no podemos olvidar que no somos perfectos, cada uno de nosotros también ha herido o traicionado a otras personas en nuestra vida. Todo esto hace parte de nuestra condición humana. 
Las palabras mencionadas por Jesús donde indica que debemos amar a nuestros enemigos, no quiere decir, exactamente esa persona deba convertirse en uno de mis mejores amigos o en la persona más cercana a mí. Jesús lo que nos pide y nos enseña es que, perdonar es ante todo una decisión que lleva consigo mismo un proceso de sanación espiritual y emocional. Es un camino hacia el perdón y esto puede tardar mucho tiempo, y es bastante comprensible. Pero no podemos olvidar que, en algún momento de nuestra vida tenemos que elegir dar el primer paso, nadie puede obligarnos a dar este paso; somos los únicos que podemos tomar esta decisión e ir hacia el camino del perdón. Por lo tanto, debemos estar conscientes, puede pasar mucho tiempo hasta que estemos listos y dispuestos a comenzar el proceso de perdón, también debemos ser conscientes que el tiempo pasa demasiado rápido y sin darnos cuenta ya la vida ha pasado ante nuestros ojos y hemos estado viviendo gran parte de ella alimentados por el odio, sin abrir la puerta a la reconciliación, a la sanación, el perdón y el amor.
Jesús no pide imposibles, ni quiere "jugar" al perdón. Continuamente, nos invita no solo soltar esa persona que nos hirió, sino también a liberarnos del dolor, la ira que nos ata y nos destruye. Jesús es paciente y continuamente nos llama. Quizás hoy sea un buen día para iniciar y dar ese paso, no tengas miedo a perdonar y abrir el corazón al amor.

 Luis Valencia
Misionero Laino


Comentarios